En verano de 2011 un alumno en sueltas hizo una mala
maniobra en la toma, ya en tierra, y su planeador EC-BUK chocó con un tren de
remolque esperando para salir.
Lo que para el alumno afortunadamente sólo resultó ser un gran susto, sin
embargo, el avión resultó “siniestro total” …. aunque entre los aficionados al
vuelo, hemos visto que con ganas, y ayuda todavía tiene posibilidad de arreglo.
Por consiguiente nos empezó a interesar el tema porque los
socios de las Sillas Voladoras y cualquier persona con discapacidad que quiera
darse un vuelo dependemos todos del hasta ahora único planeador adaptado de la
escuela de Senasa, el EC-BUO y a días o en competiciones, con overbooking de
personas interesadas en manejarlo con sus manos….
Nos pusimos en contacto con la propiedad SENASA para ver
si nos podían vender los restos.
En principio nos contestaron que sí pero que primero tendrían que chequear toda
la parte legal. Quedaron en tenernos al tanto.
El asunto empezó a alargarse, una vez parecía que estaba ya prácticamente
resuelto, luego otra vez había rumores de que ya lo iban a mandar a que lo
destruyeran definitivamente.
Una carta dirigida al Presidente de SENASA en diciembre de 2012 por fin dio su
resultado positivo, se redactó el primer borrador de un contrato de
compra-venta por 2.000€ y otro de usufructo por parte de Senasa.
Después de varios cambios de texto por fin estábamos de acuerdo ambas partes.
En diciembre de 2013 se firmó la compra-venta ante
notario.
A continuación tocó hacer el trámite del “cambio de
titularidad” que costó otros pocos meses pero desde junio de 2014 toda la
documentación está a nombre de “Las Sillas Voladoras”.
Ahora “sólo” queda el pequeño gran detalle de encontrar
un/os spónsor/es que estén dispuestos a financiarnos el arreglo y, sobre todo,
la adaptación al manejo manual en ambas cabinas de nuestro EC-BUK.
Si alguien quiere compartirlo con algún amigo u organismo…
al que le pudiera interesar, seria increíble y os lo agradecemos de antemano.
Atentamente,
Las Sillas Voladoras
¡YA TENEMOS AVIÓN PROPIO! - Adquisición de
la aeronave EC-BUK
El junio de 2014
La historia es la siguiente:
En verano de 2010, un alumno de Ocaña, nada más tomar tierra, tuvo un percance
con uno de los ASK-21 de la Escuela, el EC-BUK que a consecuencia del golpe tan
fuerte fue declarado siniestro total.
Para poder dar mayor servicio a la gran aceptación que
está teniendo el vuelo entre las personas con discapacidad, se nos ocurrió la
posibilidad de recuperar ese
planeador de SENASA, para, con el tiempo y la financiación de patrocinadores
ponerlo otra vez en vuelo, al igual que se hizo en el año 2000 con el EC-BUO.
La idea de este segundo avión adaptado era tener uno propio,
aunque gestionado también por SENASA, para así poder salir con él a dar vuelos
de divulgación por cualquier aeródromo de España sin tener que pedir permiso a
nadie.
La Asociación de las Sillas Voladoras ha conseguido quedarse con el avión por
los 2.000 € acordados y así impedir su más que lamentable destrucción. Ahora es
propiedad de las Sillas Voladoras, aunque bajo un convenio de colaboración,
teniendo por primera vez además del factor humano, patrimonio material.
Ahora viene la parte tal vez más difícil, o sea conseguir la financiación.
Para poder hacer una valoración de la reconstrucción del velero EC-BUK hay que
1.
a) Pedir un presupuesto a un taller certificado
y ver si es mejor reparar o comprar uno
o las dos alas.
Como es lógico, el propio fabricante Alexander Schleicher no ha podido hacer
una
valoración sólo con ver las fotos.
b) Elaborar un proyecto para poder presentarlo a posibles promotores de la
reconstrucción y adaptación de la aeronave.
Aunque los tiempos sean difíciles nos esforzaremos todo lo que podamos para
encontrar spónsores dispuestos a darnos financiación para reconstruir el recién
adquirido EC-BUK. ¡Se admiten grandes donativos! ¡Serán muy bien recibidos!
Esperamos y confiamos en recibir el apoyo económico que
nos hace falta en un plazo razonable para que nuestro sueño y el de muchas
personas con discapacidad que no se pueden acercar a Ocaña para darse el vuelo
tanto tiempo añorado se cumpla, o sea que seremos los demás que nos acercaremos
donde estén ellos para que
POR FIN ellos también puedan conocer lo que es VOLAR.